Duelo de cariño y magia
dos estrellas que son luz,
el espacio tranquilo entre la noche y
el día
cada uno respira silencios
no necesitan calor de otros.
Ella atrapada en amores nostálgicos
y en canciones de dolor por un adiós,
princesa de cuentos del ayer
tímida, pálida y coqueta como ninguna
desnuda entre las montañas del tiempo,
ternura envuelta entre cielos azules
cuelga en su sombra un collar de
estrellas
sutil y bella como ninguna otra.
El majestuoso y firme
despierta cubierto de fuerza
a lomos de un color radiante
poderoso Dios de la Naturaleza,
se sonroja cuando ve a su amada ,
lanza una mirada llena de amor callado
y la besa en la esquina del crepúsculo.
Cruzan miradas tan dulces
que las rosas escondidas de frío
abren sus pétalos cubiertos de envidia.
Una tormenta de luceros
remueve el firmamento,
bandadas de golondrinas atraviesan mi
alma
ríos de vida que se acomodan sobre los
campos.
Es un duelo de pasión
tejido sobre la tierra
paisaje de flores arrancadas a los sueños
que cada mañana vivimos entre prisas
y tan solos que olvidamos respirar el
momento.
Pero ellos siguen felices
y sin importarles la lluvia
se miran sobre el espejo de mares y
lagos
y vuelven a sonreír
entre una cascada de complicidad.
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